La Generalitat refuerza la vigilancia contra incendios con 270 recursos operativos en la Comunitat Valenciana

El dispositivo incluye 66 observatorios forestales y más de 130 unidades de prevención, con una inversión clave tras los daños causados por la DANA

La Generalitat Valenciana ha reforzado su servicio de vigilancia preventiva frente a incendios forestales con 270 recursos distribuidos estratégicamente por todo el territorio autonómico, según ha anunciado el conseller de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio, Vicente Martínez Mus, durante su visita al observatorio forestal del Alto del Pino, en el municipio de Serra.

Martínez Mus ha señalado que este refuerzo “mejora la coordinación entre administraciones y optimiza la capacidad de respuesta”, subrayando que la prevención de incendios “es una tarea constante durante todo el año, no solo en verano”. Desde enero, se han ido incorporando nuevas unidades de prevención y personal técnico que estarán completamente operativos en junio, coincidiendo con el aumento del riesgo por altas temperaturas.

Un dispositivo ampliado y permanente

El servicio incluye ahora 66 observatorios forestales, 136 unidades de prevención, 10 unidades de mantenimiento, así como cuatro efectivos en las centrales de prevención, siete técnicos de análisis y otras 40 personas distribuidas entre estructuras provinciales y autonómicas. Las funciones de este dispositivo abarcan desde la vigilancia disuasoria y la detección temprana de incendios, hasta la coordinación del acceso de medios de extinción y el seguimiento del avance del fuego.

93 millones de euros para reparar infraestructuras dañadas por la DANA

El conseller también ha informado de una actuación de emergencia aprobada recientemente por el Consell para restaurar infraestructuras de prevención de incendios dañadas por las riadas de octubre de 2024. Esta actuación cuenta con un presupuesto estimado de 93 millones de euros, y contempla la reparación de más de 1.200 puntos afectados, entre ellos 17 puentes, 480 muros inestables, 994 firmes deteriorados, 199 árboles caídos y 305 unidades de vegetación afectada.

La Generalitat quiere garantizar que todos estos elementos estén en plenas condiciones de operatividad antes del verano, para proteger los montes valencianos de posibles emergencias forestales en un contexto de cambio climático y episodios extremos cada vez más frecuentes.