La DGT instala nuevos radares en Catarroja, Alaquás, Riba-roja y El Puerto de Sagunto

 

La Dirección General de Tráfico ha activado cuatro nuevos radares en la provincia de Valencia dentro de su plan de ampliación del control de velocidad en las carreteras españolas. Estas incorporaciones forman parte de los ocho nuevos dispositivos instalados en la Comunidad Valenciana, con el objetivo de reforzar la seguridad vial y reducir la siniestralidad.

En el caso de Valencia, se han colocado dos radares fijos y dos radares de tramo en vías de alta circulación.

Ubicación de los nuevos radares en Valencia

Los radares fijos han sido instalados en:

• V-31, a la altura de Catarroja, en el kilómetro 6,125, en sentido decreciente.
• CV-410, a la altura de Alacuás, en el kilómetro 3,510, en sentido creciente.

Los radares de tramo controlan la velocidad media de los vehículos en los siguientes puntos:

• A-3, entre los kilómetros 347,1 y 349,15, a la altura de Ribarroja del Turia, en sentido creciente.
• V-23, entre los kilómetros 3,330 y 1,600, a la altura de El Puerto de Sagunto, en sentido decreciente.

Cómo funcionan los radares de tramo

A diferencia de los radares fijos, los radares de tramo no miden la velocidad en un punto concreto, sino que calculan la velocidad media del vehículo en una determinada distancia. Un sistema de cámaras registra la matrícula al inicio y al final del tramo, y un ordenador determina si se ha superado el límite permitido.

Márgenes de error en los nuevos radares

Según la normativa vigente, durante su primer año de funcionamiento, estos radares contarán con un margen de error de ±3 km/h para velocidades inferiores a 100 km/h y de ±3 % para velocidades superiores a 100 km/h.

Con la instalación de estos dispositivos, la DGT refuerza su estrategia de control de velocidad en la provincia de Valencia, sumando nuevos puntos de vigilancia para garantizar el cumplimiento de los límites establecidos en las carreteras.

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