CSIF alerta del cierre de 102 camas en los hospitales Arnau de Vilanova y Llíria

El sindicato CSIF ha alertado del cierre de 102 camas en los hospitales Arnau de Vilanova de València y el de Llíria y ha pedido por escrito a la Gerencia de ese departamento de salud que detalle el número de cirugías suspendidas en todo el periodo estival y el número total de personal no contratado.

En un comunicado, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) explica que el hospital Arnau de Vilanova tiene 76 camas clausuradas por el cierre de la tercera planta por reformas y la unión de las plantas quirúrgicas primera y segunda, mientras que el en el de Llíria el cierre de la cuarta planta, destinada a Medicina Interna, ha detraído 26 camas.

Apunta que estos hechos han conllevado una "repercusión directa" en la atención a pacientes, advierte del "colapso" en Urgencias y en plantas al haberse reducido el número de camas disponibles y lamenta que la dirección del departamento no lo haya previsto.

Desde la gerencia del departamento de salud ha contestado al escrito del sindicato indicando que como "sucede todos los años, se cierra una planta para realizar mejoras en las infraestructuras hospitalarias, disminuyendo el número de camas funcionantes para dignificar los espacios" y añade que dada la antigüedad del edificio "es necesario para garantizar la seguridad del paciente y de los trabajadores".

En la contestación al sindicato, al que ha tenido acceso EFE, añade que este año se han previsto mejoras en la tercera planta del Hospital Arnau, y para ello es necesario cerrar 47 habitaciones "no 76 como figura en su escrito", mientras que en el de Llíria se va a pintar la cuarta planta en julio y, por ello, "disminuyen 26 camas, pero se han habilitado 10 más" por lo que hay una merma de 16 camas.

El sindicato también subraya en su escrito que “debido a la presión asistencial se ha tenido que habilitar el circuito 2 de Urgencias y suspender partes quirúrgicos, al no disponer de camas libres, para poder ubicar los ingresos programados por cirugías”, y añade que esta circunstancia "ha repercutido en los trabajadores al cambiarles sus planillas sin previo aviso”.

Recalca que el servicio de Urgencias "está colapsado, lo que deriva en una demora del ingreso de pacientes en las plantas que, a su vez, también están colapsadas por haber disminuido el número total de camas disponibles”, y añade que a esas carencias suma “la falta de personal suficiente para cubrir los turnos de vacaciones”.

El CSIF incide en que ese cierre de camas "ha servido de excusa a la dirección para no dotar al plan de vacaciones del suficiente personal" y, por ello, ha reclamado una explicación del “número total de profesionales que no se ha contratado con la disminución de camas” y “cuántas cirugías programadas se han suspendido por ese cierre de camas y cuántas está prevista que lo hagan en todo el periodo estival”.

Al respecto, la gerente del Departamento destaca que el aumento de la actividad en urgencias y el número de ingresos que se han producido en las dos últimas semanas "no era previsible en esta época del año" y para poder asegurar la asistencia "se procede a aperturar el circuito 2 de urgencias y se ha disminuido el número de intervenciones que requieren ingreso hospitalario, operando más pacientes" en la Unidad de cirugía sin ingreso (UCSI).

Respecto al plan de vacaciones, la Gerencia afirma que se han contratado el mismo número de profesionales que el año pasado, puesto que el importe adjudicado al departamento ha sido el mismo que en 2022, aunque el presupuesto ha aumentado un cuatro por ciento.

Por último afirma que lamentan haber tenido que realizar "algún ajuste en las planillas de los trabajadores", pero no era posible garantizar la asistencia "sin que se realizaban dichos cambios". EFE

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