Subastan una promoción 'zombi' de 40 viviendas sin acabar desde hace años en Náquera

 Una promoción abandonada, conocida como “La Lloma”, sale a subasta para recuperar su valor

Con los precios de la vivienda en máximos, algunos de los esqueletos a medio construir, abandonados tras el estallido de la burbuja inmobiliaria, vuelven a emerger en el mercado. Tal como detalla elEconomista.es en Náquera se sitúa una de estas promociones, popularmente denominada “promoción zombi”, que ha permanecido sin terminar durante años. Este inmueble, a la entrada del municipio valenciano, representa una segunda oportunidad para recuperar el valor de una inversión que lleva demasiado tiempo en pausa.

Detalles de la Subasta
La empresa especializada en procesos inmobiliarios, eactivos.com, ha puesto a subasta los derechos de crédito sobre la urbanización en construcción, denominada “La Lloma”. El activo se valora en 11,75 millones de euros y la subasta se orienta a inversores y promotoras que vean en esta oportunidad el potencial de reactivar un proyecto que ha quedado en el limbo durante años. La operación se enmarca en la recuperación de activos inmobiliarios con el objetivo de dinamizar el mercado en tiempos de altos precios.

Diseño y Distribución del Complejo
La promoción se levanta sobre una parcela de 1.987,13 metros cuadrados y comprende un conjunto de cinco bloques dispuestos en forma de “U”, organizados en torno a un espacio central destinado a zonas comunes. Este espacio, que se proyecta incluir piscina, jardines y áreas de esparcimiento, constituye el núcleo que interconecta los elementos residenciales y comerciales. El complejo está diseñado para albergar tres alturas: un sótano destinado a aparcamiento, una planta baja que integra zaguanes y locales comerciales, y dos plantas superiores dedicadas a las viviendas, con terrazas y desvanes que aportan luz y ventilación natural.

Perspectivas y Repercusiones
La puesta en subasta de esta promoción “zombi” se enmarca en un contexto en el que el mercado inmobiliario vuelve a valorar activos abandonados, dando nueva vida a proyectos que quedaron en el olvido tras la crisis. Con 40 viviendas y 10 locales comerciales, este complejo no solo representa un activo económico, sino también una oportunidad para recuperar y dinamizar el tejido urbano de Náquera. La operación, que invita a inversores a apostar por la transformación de un patrimonio abandonado, promete marcar un antes y un después en la reconversión de espacios residenciales en la comarca valenciana.

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